PACHECO BRISEIDA ¿Hablamos de artesanías? Una artesanía es el arte y técnica de elaborar objetos o productos a mano. En nuestro país podemos obtener cientos de artesanías por doquier, en cualquier rincón encontraremos piezas deslumbrantes y únicas. En esta ocasión, hablaré sobre una de las piezas más emblemáticas del estado de Oaxaca. Unas de las principales artesanías del estado de Oaxaca son las elaboradas con barro negro, cabe mencionar que dicho color es gracias a las propiedades del mismo y no es necesario utilizar algún colorante. El barro negro data de miles de años atrás, como evidencia de ello, fueron encontrados en Monte Albán (ciudad zapoteca) restos de utensilios de un color gris mate que utilizaban en la cocina. Artesanos del estado comenzaron a trabajar dicho material, sin duda, la comunidad de San Bartolo Coyotepec logró destacar entre todas estas, convirtiéndose en el principal y más importante productor de artesanías con barro negro. En este lugar, la mayoría de las familias se dedican a la elaboración de dichas piezas. Tal es el impacto de este oficio en el poblado que cada año realizan una feria para la exposición de sus artesanías.
En un principio, las piezas de barro negro eran de utilería, como lo mencionaba anteriormente, se fabricaban cántaros, vajillas, ollas, etc. Hoy, en cambio, el uso de este material se ha centrado en la creación de piezas decorativas.
El proceso de elaboración conlleva varias semanas: se recoge la tierra con el barro, para posteriormente separarlos mediante un proceso que puede tardar casi un mes. Una vez separados, comienza la elaboración de las piezas, esto puede durar otro par de semanas para que el artesano a través de sus manos dé la forma que desee.
Cuando el trabajo anterior ha terminado debe ponerse a secar en un lugar cerrado para protegerlo de los cambios de temperatura. Este momento necesitará de otras semanas más. Un dato muy importante es que para que tome el color negro brillante y no gris mate como en la antigüedad, el artesano deberá pulirla (paso que a través de los años ellos mismos descubrieron). Este proceso debe efectuarse cuando la pieza está casi seca. Después de haberse secado, las piezas son cocidas en hornos de leña (bajo tierra) a temperaturas muy altas. Cuando son retiradas las que fueron pulidas tendrán el tan esperado color negro brillante, mientras que las que no lo fueron serán gris mate como las de años atrás. Las familias artesanas al terminar su trabajo, colocan las producciones en sus puestos, donde las venden a precios variados a los turistas, o bien, las trasladan a la ciudad de Oaxaca para comercializarlas con los lugareños o visitantes, quienes admiran tan arduo trabajo en un tono negro llamativo.
Sin duda alguna, ser artesano es un trabajo digno de ser aplaudido y reconocido, pues son personas que con gran talento y dedicación logran las verdaderas joyas auténticas que representan a nuestro país.
No pierdas la oportunidad de visitar este lugar, y claro, obtener una de dichas piezas tan emblemáticas del hermoso estado de Oaxaca.