top of page
Briseida Pacheco

CORRE


En la soledad del ocaso vi desprenderse cada minuto compartido

Uno a uno los recuerdos se quedaron, porque a ellos no pude dejarlos.

Miles de primaveras vividas, y sin darme cuenta fueron más inviernos. Donde en unos el frío helado de sus manos me quemaron.

En las tardes lluviosas de verano solía pasar por mi para vernos,

Reíamos y llorábamos a ratos después que un beso nos calmara

Sufría por no saber que hacía mientras no estuviéramos juntos.

Nadie me dio paz como él, pero sin darme cuenta me la arrebataba

Sigilosamente, como un hilo descosido.

Nunca amé en la vida como a él

Caminamos tantas veces de la mano, tantos abrazos, tan necesitados

Cuando el fracaso nos hundía la paciencia nos delató

Y continuamos porque así lo dijimos cuando el amor nos desbordaba

Pero no, no era por amor eran los celos de estar lejos

Cuando las cosas no iban bien y solo con besos calmarnos, no era amor

las heridas, las cosas por decir aumentaron.

No era amor cuando dijo que ese amigo no debía serlo

Y lo dejé de lado.

Nunca fue amor cuando dijo que ese delineador que yo amaba era de lo más feo en mí.

Y me quedé porque lo amaba, porque quería estar con él

Me quedé por que deseaba despertar todos los días a su lado

Así pasaron años y en secreto lo fui dando por perdido

Me quede porque habíamos prometido no dejarnos.

Ahora me carcome el deseo de estar juntos y el corazón se me oprime.

Pero a veces el amor no es suficiente.

Y si no eres feliz vete, corre…

4 visualizaciones0 comentarios

Комментарии


bottom of page